sábado, 25 de noviembre de 2017

VISIÓN DE HELICÓPTERO DEL LIDERAZGO



LA  PERSPECTIVA  APORTA  CLARIDAD MENTAL

                                                     
“Solo tenemos experiencia de aquello que hemos vivido y hemos reflexionado”














La dificultad de ver una situación o asunto en su conjunto, suele tener como causa el perderse en los detalles, de tal forma que el árbol nos oculta el bosque.  Tener un conocimiento de la necesidad de precisión y un interés por el detalle tiene sus ventajas y sus inconvenientes. Entre estos últimos, además de no dejarnos ver el bosque, también están el de no saber definir prioridades, no saber separar lo importante de lo que no lo es (el detalle se convierte en anécdota) y no tener  capacidad de síntesis.


 El tema de liderazgo es un buen ejemplo para explicar el  “segundo diluvio” al que estamos asistiendo, y que nos está 'ahogando', no con agua,  sino con información. Si en el pasado se aplicó lo de ocultar información a los demás para uno destacar en estar al corriente de todo y hacerse el imprescindible (fue una conducta muy extendida en los  distintos niveles jerárquicos de las empresas), hoy en día la cosa funciona al revés: se avasalla a la gente con todo un exceso de información irrelevante. La consecuencia de esto, entre otras muchas,  es la de que simplemente no sabemos a qué prestar atención y pasamos el tiempo interesándonos, investigando y debatiendo asuntos secundarios, anécdotas y practicando el onanismo mental. La mayoría se queda mirando el dedo; muy pocos miran la luna.   

Vamos a un ejemplo práctico de esto que estamos diciendo.
 Una consulta a Google (24-11-2017, 11:11 horas) con la palabra Líder, nos da lo siguiente: Aproximadamente 108.000.000 resultados.
















Una nueva consulta con otra herramienta llamadaAnswerThePublic  https://answerthepublic.com/
 la cual muestra todas las preguntas que la gente busca en Google sobre el término que tú le indiques da como resultado, segundos después, 858 cuestiones planteadas, dudas más frecuentes o los aspectos que más interesan. En la imagen, se muestran las preguntas más comunes sobre el término. Con estos ejemplos podemos ver y apreciar los dos fenómenos: el del “diluvio”, y el de las anécdotas. Son muchas las miradas que se dirigen al dedo olvidándose de la luna.



Si antes el tener poder pasaba necesariamente por tener acceso a los datos y a la información, hoy en día pasa por saber qué obviar, por hacer las cosas sencillas, prácticas y manejables, lo cual se logra, no cuando ya no hay nada más que añadir, sino nada que sacar.  Es necesario combatir el “onanismo mental” que se refleja en artículos, debates, cursos, conferencias y demás foros de divulgación.

Para hacer sencillo (que no simple), práctico y manejable el tema del liderazgo en el sentido que acabamos de mencionar,  solo puede hacerse teniendo una “visión de helicóptero” del mismo. Para tener este tipo de visión una condición necesaria es no perderse en las anécdotas. Para esto  último, para impedir que el árbol nos oculte el bosque, abordaremos, en sucesivos artículos,  las HERRAMIENTAS CONCEPTUALES fundamentales, para abordar la vida en general, y desarrollar el liderazgo en particular.

“La perfección se logra no cuando no queda nada que agregar, sino cuando ya no queda nada que quitar”
Saint-Exupéry





REFERENCIAS:
   

-
IGLESIAS RODRÍGUEZ Julio.: "Construyendo Líderes. ¿A quién llamar Líder?" Edición Digital. Vigo 2008.


-La práctica consciente te lleva a ser competente: http://tv.uvigo.es/es/video/mm/15929.html



   

viernes, 3 de noviembre de 2017

LA FRAGILIDAD DEL TRABAJO 3: EL AHORA

LA FRAGILIDAD DEL TRABAJO  3


EL AHORA: 

De lo general a lo concreto.

         QUE MÁS  PODEMOS HACER,
                                     para que  lo que puede  acabar pasando, no pase.
   “Ser es hacer”

SITUARSE EN EL CONTEXTO


En La Fragilidad del Trabajo 1,  hemos pasado por los  tres tiempos: El Antes, El Ahora y El Mañana. Por el pasado, sin el cual no se puede entender el presente; por el presente, sin el cual no se puede construir el futuro; por el futuro, que da sentido a los otros dos y motivación (energía) al presente. 

En La Fragilidad del Trabajo 2, tratamos de enfocar el QUÉ PODEMOS HACER, desde un punto de vista amplio y general. Si has leído el post,  con atención concentrada, habrás sacado 5 o 6 ideas clave.



Hoy, en La Fragilidad del Trabajo 3, vamos ya a concretar  QUE MÁS PODEMOS HACER.
Estamos tratando de qué hacer, ahora,   para construir un mañana determinado, es decir, estamos reconociendo de forma explícita, que todos podemos hacer algo, unos más, otros menos, pero todos algo, en la construcción de un futuro deseado.





PLANIFICANDO  EL FUTURO
“La mirada en el cielo y los pies en la tierra”


Para ganar en concreción me voy a referir a cada persona, de una en una. Aquí no valen las generalidades ya que cada uno somos únicos. Me dirijo, pues, a ti individualmente, como persona única e irrepetible.
  
Planificar el futuro requiere, en primer lugar, aplicar uno de los tres principios que están detrás de toda “vida lograda” (diferente de lo que comúnmente llamamos éxito): La Auto conciencia: la capacidad de “darse cuenta” [1]. Para facilitar el incremento de esta Auto conciencia,  aportamos la herramienta de la Figura 1.

 Cada uno debe tener en cuenta  los tres futuros que los humanos tenemos: futuro probable  o muy probable,  futuro menos probable pero posible y, finalmente, futuro imposible. Tú, debes de tener en cuenta los tuyos, diferente de todos los demás, en función de variables tales como las tres edades, salud, aptitudes, expectativas,  etc.

No te olvides que la gran coalición está formada por el pensamiento crítico más  el optimismo funcional, distinto del optimismo de pandereta, tan en boga, que sostiene que todo es posible. Un optimismo funcional diferencia claramente entre riesgo e incertidumbre. El riesgo puede  medirse a través  de las opciones disponibles y de las probabilidades que tienen cada una de las opciones. La incertidumbre no es medible, es todo azar.  




En donde te encuentres ahora mismo,  en función de cual haya sido tu  trayectoria,  y el cómo te sientas, es fruto de las decisiones que has tomado o dejado de tomar en el pasado y, sobre todo, de los hábitos que hayas ido creando a lo largo de tu vida. El pasado que viviste creó en ti unos hábitos determinados que marcan una predisposición a actuar de una manera determinada la cual, a su vez, determina la dirección que tomas.

Los hábitos se pueden crear y, en consecuencia, se pueden eliminar. En otra ocasión desarrollaremos un modelo empírico que he trabajado y practicado largos años.

De momento clarifica tu situación actual con respecto a tus tres futuros.


TUS FUTUROS:


¿Tienes una idea, más a menos elaborada,  de  los acontecimientos que puedes ubicar en cada uno de los tres futuros?

¿Puede que algo que tengas en el futuro imposible, podrías ubicarlo en el futuro menos probable pero posible?

¿Tal vez tienes algo en el futuro muy probable que, si fueras realista,  deberías ubicarlo en el futuro imposible? 

 
A medida que vamos cumpliendo años, edad cronológica, se va incrementando la lista de cosas que pertenecen al  “futuro imposible”. Por eso hay que empezar cuanto antes a meterlas en el apartado de “Futuro posible”.

El optimismo funcional, parte del principio  de que el futuro, en buena parte  se puede crear, no solamente deseándolo, (como sostiene el optimismo de pandereta), sino poniéndose a trabajar para crear el futuro que tú deseas. Nos aporta la herramienta de la Figura 3.

Consiste,  en primer lugar,  mirar hacia atrás y, en segundo lugar, mirar hacia adelante.
Mirando hacia atrás: Sitúate (imaginación) en una edad de 80 años. Mira hacia atrás y responde a las preguntas que aparecen en la figura.
Seguidamente, sitúate en el presente, en el ahora,  mira hacia adelante y márcate el plan de acción correspondiente.


Haz lo que quieras hacer, antes de que se convierta en lo que te gustaría hacer pero ya no puedes hacerlo.
Siempre he tenido mucho interés en las opiniones de personas muy mayores que están en el final de su vida. Conservo toda una colección de páginas de periódico (aún no teníamos internet), de entrevistas realizadas por diversos periodistas a este tipo de personas.  Hablan sin los condicionamientos que tenemos los demás, con sinceridad,  y hablan desde la sabiduría que han acumulado a lo largo de su ciclo vital. Entre otras muchas cosas he descubierto que no suelen arrepentirse de lo que hicieron, pero si suelen arrepentirse de lo que no hicieron.

¿Tal vez echas de menos no haber puesto más en juego tus recursos personales y haberte arriesgado más?

CREANDO   EL FUTURO probable o muy probable.
Decíamos, anteriormente, que sin el pasado, no se puede entender el presente; sin el presente, no se puede construir el futuro; sin el futuro, no encontramos  sentido ni al pasado ni motivación (energía) en el  presente.  Lo que hacemos en el presente determina el futuro. Acciones que hoy llevamos a cabo tienen consecuencias en el futuro. Acciones que hoy  no llevamos a cabo, determinan un futuro diferente. Si algo me gusta”, pero “no me conviene”, posponerlo y llevar a cabo algo que “me conviene” me permite alcanzar un objetivo o meta determinado. Ver, para mejor entenderlo y aplicarlo,  en este mismo blog, la entrada “Decálogo de  AUTOGESTIÓN: Tú conduces tu vida, tú DECIDES”.
Si bien es cierto que creamos el futuro con lo que hacemos o dejamos de hacer en el presente, también lo es,  que el futuro crea el presente. La idea que tú tengas de cómo será tu futuro, te ayuda y motiva a llevar un presente determinado. Durante mucho tiempo, en selección de personal,  se consideró que el mejor predictor de la trayectoria laboral de una persona que se contrataba, era el cómo se imaginaba su futuro laboral. Por ello se exploraba tanto en la entrevista de selección sobre ello.

También es cierto que  tener en cuenta el pasado, conocer la historia, nos ayuda también a la construcción de un presente determinado y, en consecuencia, a un futuro concreto. Saber aquello que funcionó y trajo buenas consecuencias y aquello que se hizo y lo que ocasionó  fue el  desastre y desolación, es el primer paso para tomar conciencia de nuestro presente y de los comportamientos y conductas más adecuados. Las mayores ventajas de conocer el pasado no se sacan repitiéndolo, sino liberándonos del mismo, es decir, ser conscientes de que tu yo actual, tus pensamientos, miedos, deseos, expectativas,  etc.,  fueron modelados por la historia, lo que te impide, en muchos casos,  desprenderte de los mismos e imaginar futuros posibles que  hoy das por imposibles. En un modelo de cambio que veremos más adelante, en otro post, nos daremos cuenta de lo importante que es empezar dicho cambio por cambiar nuestra propia percepción y nuestra forma de pensar, antes de seguir avanzando en el mismo.

En definitiva, se trata de saber sacar ventaja de esa facultad que tiene  Homo sapiens,  que te permite ponerte en el pasado a través de tu memoria, en el presente a través de tu percepción  y en el futuro a través de tu imaginación. Las dos primeras, memoria y percepción las compartimos con otros animales. La tercera, imaginación, por lo que sabemos al día de hoy, parece ser exclusiva de Homo sapiens.

Una de las múltiples preguntas de se hace Yuval Noah Harari, profesor de la Universidad Hebrea de Jerusalén, es la siguiente: 
"¿Qué le ocurrirá al mercado laboral cuando la inteligencia artificial consiga mejores resultados que los humanos en la mayoría de las tareas cognitivas?" [2]

Los algoritmos informáticos  que creará la inteligencia artificial, sin duda ya nos superan hoy en algunas tareas cognitivas. Nos superarán mañana (un mañana próximo),  en la mayoría de ellas, pero, ¿llegarán algún día a tener imaginación?

Los humanos nos movemos en tres realidades: la realidad objetiva, la realidad subjetiva, y la realidad intersubjetiva. En la primera de ella, la objetiva, la inteligencia artificial nos dará lecciones, pero, ¿y en las otras dos? ¿Llegarán a tener conciencia plena de sí mismos  y, en consecuencia,  realidad subjetiva construida por uno mismo de forma individual a través de sus propias percepciones? ¿Llegarán a comunicarse y  compartir entre ellos su propia realidad subjetiva y a generar creencias y sentimientos colectivos ante determinadas cuestiones que son las que construyen la realidad intersubjetiva? Por ejemplo, ¿llegarán a sentir lo que sentimos los humanos ante el símbolo de una bandera? ¿Llegarán a entender que un papel, sin ningún valor objetivo, que pone  50 euros  permite satisfacer toda una seria de necesidades por que los humanos creemos en ello?

Byung-Chul Han, a partir de “El tiempo recobrado” de Proust, nos dice:
“Solo las relaciones de afinidad, amistad o familia hacen que las cosas sean verdaderas. La verdad es lo opuesto de la mera sensación fortuita. Implica un vínculo, una relación y una proximidad. Solo las relaciones intensivas hacen que las cosas sean reales” [3]

Este tipo de preguntas no nos las podríamos hacer los humanos si no tuviéramos imaginación, realidad subjetiva y realidad intersubjetiva. ¿La llegarán a tener los algoritmos futuros? ¿La perderemos los humanos para adaptarse al mundo creado por la inteligencia artificial?

Adaptarse o adaptarlo, he ahí la cuestión. Adaptarse al mundo, la vida las situaciones  o adaptar el mundo, la vida, las situaciones a nosotros.


¿Cómo te imaginas  tu futuro?


Para incrementar tu conciencia, tu “darte cuenta” te aporto la  Herramienta   de la Figura 4.
“En los momentos de crisis, solo la imaginación es más importante que el conocimiento”.
-Albert Einstein-





Referencias Bibliográficas

[1] Video: Decálogo de Autogestión. Cardar para progresar
[2] Noah Harari Yuval.: Homo Deus. Breve historia del mañana. Peguin Random House Grupo Editorial, S.A.U. Barcelona, 2016. p. 299 
 [3],  Byung-Chul Han.: El aroma del tiempo. Pensamiento Herder Editorial, S.L., Barcelona 2015. p. 74










































lunes, 18 de septiembre de 2017

LA FRAGILIDAD DEL TRABAJO 2: QUE PODEMOS HACER


EL AHORA: 

QUE PODEMOS HACER, para que  lo que puede  acabar pasando, no pase.                                 

                                                                                                       “Ser es hacer”

En el artículo anterior hemos pasado por los  tres tiempos: El Antes, El Ahora y El Mañana. Por el pasado, sin el cual no se puede entender el presente; por el presente, sin el cual no se puede construir el futuro; por el futuro, que da sentido a los otros dos y motivación (energía) al presente. 

 Volvemos  de nuevo al Ahora, al presente, para desde aquí y ahora,  ver qué podemos hacer para construir un futuro diferente al que muchos expertos nos alertan que llegará   con muchas deficiencias de gran calado. 

 La gran pregunta es:

 Desde el punto de vista práctico, ¿Qué debemos y podemos  hacer ahora?


Me atrevo a exponer mi opinión, dando por hecho que puede haber quién no coincida para nada con ella. Perfecto. Siempre es bueno y productivo tener opiniones distintas, siempre, claro está,  que estén respaldadas por los argumentos oportunos,  es decir, por razonamientos que demuestran, refutan o justifican algo. Mis opiniones pueden ser más o menos atinadas, pero,  lo que sí es seguro, es que tienen el valor de basarse en respuestas propias que expresan lo que realmente   siento y pienso. Estoy convencido que hoy en día, esto de expresar lo que uno piensa realmente, cuando la mayoría de la población tiene miedo a manifestar su opinión sobre determinados temas, aporta por sí mismo  un valor añadido importante.


  ¿Tienes miedo a hablar, a manifestar abiertamente tu opinión? No me refiero al miedo escénico derivado de hablar en público, sino a hablar  en contextos interpersonales o intergrupales.

¿Eres consciente de que la palabra, es la herramienta que utilizamos para la manifestación de uno mismo?


Parto de la premisa  de que todos entendemos que para cuestiones complejas no existen soluciones simples, así como tampoco hay soluciones que contenten a todos. Aun cuando en general no rehúyo el “mojarme”,  y suelo manifestar mi juicio con pasión y convicción, dada la naturaleza del tema lo desarrollaré buscando el objetivo de que cumpla la función de “no satisface plenamente a nadie y no insatisface, tampoco, plenamente a nadie". Cumpliría así con el aristotélico  “justo término medio”,  entre dos actitudes extremas y, por lo tanto,  con la virtud. Los debates actuales defendiendo posturas que o bien se ubican en el exceso o bien en el defecto; que más que razonar y argumentar se defienden con exabruptos,   es un vicio que deberíamos desterrar. En este artículo abordaremos la cuestión desde un punto de vista muy general. En otros, posteriores, entraremos ya en cuestiones concretas y precisas. 


¿Qué opinas  de la libertad de expresión? ¿Crees que la mejor forma de garantizarla es practicándola?

¿Ante un tema determinado, sueles tener una opinión propia formada y la capacidad de exponerla con asertividad?

 Que hacer


Creo que debemos recuperar una gran parte de todas aquellas “cosas buenas” que los humanos nos hemos dado a nosotros mismos a lo largo de la historia (que fueron muchas) y que no deberían caducar, que deberían tener un alcance y vigencia mayor que cualquier software ya caduco por haber aparecido otro mucho más eficiente. Así, por ejemplo, hay cuestiones de ética y de moral que deberían seguir de plena actualidad. ¿Alguien entiende que la Declaración Universal de los Derechos Humanos, una de las mejores cosas que el ser humano se ha dado a sí mismo,  debería anularse por caduca?

Recuperar aquello que nos fue útil y eficaz para construir lo más significativo y bueno de la sociedad  que tenemos, y persistir, hasta que desaparezca lo más significativo y malo, sin falsos prejuicios y no cayendo en lecturas facilonas, demagógicas e interesadas.

¿A qué me refiero con el término de “cosas buenas? 
En general, a las ideas emanadas desde diferentes contextos que dieron lugar a proyectos y realidades concretas con las cuales construimos la sociedad. Esas ideas las generaron muchas personas normales, entendiendo por “normales” la normalidad estadística, y grandes personajes que hoy tenemos olvidados.

 En consecuencia con lo anterior, se hace necesario incrementar nuestra conciencia social: conocimiento que se tiene de lo que ocurre después de haberlo reflexionado. Supone, entre otras muchas cosas, ser conscientes de como un entorno (natural, social, sociocultural, escolar, empresarial, económico, etc.) determinado puede favorecer o boicotear el desarrollo personal y social.


¿Te das cuenta de que el  convencionalismo y lo políticamente correcto se utiliza, ya no para el necesario regulamiento de una sociedad civilizada, sino para amordazar y silenciar a los miembros de un grupo o sociedad?


Muchas de esas cosas buenas las encontraremos en   las ideologías, los  sistemas políticos, las religiones, la filosofía,  etc. Es cierto que en  estas también encontramos  cosas no tan buenas e incluso manifiestamente malas. Quedarnos con las primeras y eliminar las segundas, nos debería conducir a una “sociedad mejorada”, no solo tecnológicamente, sino humanamente, éticamente, moralmente.




Figura 1: Fuente https://www.blogger.com


Con lo anterior no estoy sacando el valor que tiene a la técnica, a la tecnología y sus logros. Muchos le achacan una buena parte de los males que hoy nos asolan. ¿Qué nos proponen? ¿Tal vez frenar el desarrollo tecnológico? No. ¡Bendita tecnología y todo lo que nos ha aportado! Me permite a mí escribir este artículo hoy y dentro de unos días constatar, a través de las estadísticas que la propia tecnología nos proporciona,  que lo han leído más de mil  personas de muchos países, entre los que destacan, los que se ven en la Figura1.

 


También, una gran diversidad de profesionales de muy diversas empresas, entre ellos los que aparecen en la figura 2,  a los que habría que añadir periodistas, expertos en operaciones, conferenciantes, etc.

Sin ella no podría dar tanto alcance a mi motivación trascendente (me gusta lo que hago porque beneficia a mucha gente)












En consecuencia con lo anterior,  incrementar nuestra conciencia de a qué y a quién  prestamos nuestra atención.  Aquellos profetas que anuncian su credo bajo el presupuesto de “ya tengo la solución, ahora solo me falta encontrar el problema”, tienen que perder influencia social (eco que provocan, multiplicado por  tiempo en el  que son capaces de mantener ese eco). ¿Cómo es posible que tenga más eco una tal Belén no sé qué, que por ejemplo, cualquiera de las personas que en estos momentos están haciendo  grandes aportaciones a la ciencia y a la humanidad?

El conocimiento nace y se transmite a través de grupos que comparten “espacios de atención”, es decir, colectividades de seguidores” [1]



Esto nos va a permitir separar el grano de la paja, lo esencial de lo contingente, lo que es importante de lo que no lo es, en definitiva, pasar por la vida quedándonos con los contenidos y no distrayéndonos con la anécdota. Dicho de otra forma: no quedarnos mirando el dedo cuando el sabio señala la luna.

Así, por ejemplo, refiriéndonos a la tecnología y su desarrollo, lo esencial no está, a mi juicio, en los que nos dicen que en ella se encierran todos los males, Eso sería la anécdota. Lo esencial sería, en mi opinión, no tener miedo de la tecnología, pero sí tener miedo, entendido este  como una emoción básica que nos advierte de los peligros que atentan contra nuestra supervivencia, a humanos sin ética manejando la tecnología.  

¿Sabes que  el miedo ha sido utilizado desde siempre como arma de control social y  como herramienta de  dominación política y, también, dentro (¿muchas?, ¿algunas?) de las empresas, como herramienta de gestión?






Esto si es un verdadero peligro. Se trata de que en la “Escala del Saber de la figura 4,
no nos olvidemos del último escalón, de la Sabiduría, la cual nos da respuesta  a las preguntas  ¿por qué? y ¿para qué?, aclarándonos,  de todo lo que podemos hacer,  si debemos o no hacerlo. Técnicamente podemos hacer (hay conocimiento científico suficiente y tecnología apropiada,  para hacer  lo que Yuval Noah Harari llama “individuos mejorados”, pero, ¿para qué hacerlos? ¿Por qué hacerlos?)
Figura 4: Elaboración propia a partir de Willis Harman [2]

Otro ejemplo, podíamos sacarlo de lo que hace referencia a los sistemas políticos, en general, tan cuestionados, ¿qué debemos hacer? ¿Eliminarlos a todos e implantar uno totalmente nuevo? ¿Eliminar, por ejemplo  la doctrina del liberalismo? No. ¡Hizo grandes aportaciones a la humanidad! Las libertades civiles, la democracia representativa, la defensa de las conductas privadas y del individuo, etc. Al liberalismo político y el liberalismo social debemos muchas de las cosas buenas que tenemos en estos momentos.

¿Y el tan denostado liberalismo económico? Al liberalismo económico habría que equilibrarlo de tal forma que pusiese el mismo énfasis en la igualdad, en la distribución de la renta,  que en la libertad.
El “Laissez faire” que lleva a un mercado libre incontrolado es uno de los culpables de la decadencia moral que nos asola y todo lo que de ello se deriva. Ya no digamos el llamado neoliberalismo; a este sí que habría que “barrerlo”. Al neoliberalismo que podríamos 
sintetizar, forzando un poco el estado de la cuestión,  diciendo que está convencido de que la única misión y obligación de los pobres es contribuir exclusivamente a hacer más rico a los ya ricos, habría que, a mi juicio, extinguirlo. Un credo  que considera a las personas humanas como meros “recursos”, como meros factores de producción, como un input más de un proceso, tiene que encontrarse con que estos “recursos” piensan y se rebelan contra las injusticias.   Hay que demostrarles que no pasamos por ahí.    Es esto una de las cosas persistir, hasta que desaparezca. Es una de las cosas que representan   lo más significativo y malo que tenemos.

Es en un contexto neoliberal en donde tiene todo el sentido lo que nos decía  Yuval Noah Harari, profesor de la Universidad Hebrea de Jerusalén,    que el dilema más importante de la economía del siglo XXI será que hacer con toda la gente superflua, prescindibles, no necesaria, sin valor alguno: ni económico, ni militar ni tan siquiera con autoridad personal.

 Tzvetan Todorov, el gran pensador humanista,  nos dice:

“La economía se ha hecho independiente e insumisa a todo poder político, y la libertad que adquieren los más poderosos se ha convertido en falta de libertad para los menos poderosos. El bien común ya no está defendido, ni protegido ni exigido al nivel mínimo indispensable para la comunidad. Y el zorro libre en el gallinero quita libertad a las gallinas”.  [3]

Es esta la peor cara del capitalismo, el neoliberalismo, con su naturaleza depredadora y amoral,  el que está eliminando lo mejor que los humanos nos habíamos dado a nosotros mismos. Un capitalismo financiero que sustituye al empresario  que se ganaba la vida produciendo con eficiencia bienes y servicios útiles para todos, por el especulador que no aporta nada a la sociedad  y acumula ingentes y astronómicas cantidades de  dinero y obtención de ganancias a través del mercado financiero (acciones, productos financieros, valores, derivados y mercado de divisas).

 “Thomas Piketty concluye


“La principal fuerza desestabilizadora se vincula al hecho de que la tasa de rendimiento privado del capital puede ser significativa y duraderamente más alta que la tasa de crecimiento del ingreso y la producción. […]Esta desigualdad expresa una contradicción lógica fundamental. El empresario tiende inevitablemente  a transformarse en rentista y a dominar cada vez más a quienes sólo tienen su  trabajo – la negrilla es mía-. Una vez constituido, el capital se reproduce solo, más rápidamente de lo que crece la producción: El pasado devora al porvenir”. [4]

Alguien puede preguntarse, cuando afirmo esto, en qué medida estoy cumpliendo lo que dije anteriormente de que siempre es bueno y productivo  tener opiniones distintas, siempre que estas estén respaldadas por los argumentos oportunos es decir, por razonamientos que demuestran, refutan o justifica algo”.

“La asunción más extendida es que la verdad viene determinada por la realidad. Un enunciado es verdadero porque cumple con los criterios de verdad, no por ninguna otra razón. […] La verdad es una característica de los enunciados. La realidad es lo que hace a los enunciados verdaderos, pero la realidad en sí misma no es ni verdadera ni falsa: simplemente es". [5]

¿Te has convertido, acaso, en un neo conformista obsesionado en exclusiva por tu seguridad y dispuesto a renunciar a tu libertad personal?
¿Cómo conjugas tu necesidad de seguridad con tu necesidad de reto y variedad?
¿Cómo equilibras tu necesidad de integración y tu necesidad de individualidad? [6]



Los argumentos

La desigualdad que se está dando en estos momentos es un atentado contra la democracia en todos los sentidos. No olvidemos que hay un amplio consenso en que la democracia es el “menos malo de los sistemas políticos” y que no consiste, precisamente,  en la dominación de una minoría sobre una mayoría. ¿O sí?
Los humanos hemos creado  diversas formas de resolver los conflictos: evitación, negociación, mediación, arbitraje/tribunales, etc. Con cada una de ellas  se llega, previsiblemente, a resultados distintos.




                                    Figura 5: Elaboración propia



Voy a intentar explicar la desigualdad que nos asola, a través de una de las fábulas de Esopo

La Fábula

 El león, la zorra y el asno se asociaron para ir de caza.
Cuando ya tuvieron bastante, dijo el león al asno que repartiera entre los tres el botín.
Hizo el asno tres partes iguales y le pidió al león que escogiera la suya.
Indignado por haber hecho las tres partes iguales, saltó sobre él y lo devoró.
Entonces pidió a la zorra que fuera ella quien repartiera.
La zorra hizo un montón de casi todo, dejando en el otro grupo sólo unas piltrafas.
 Llamó al león para que escogiera de nuevo.
Al ver aquello, le preguntó el león que quién le había enseñado a repartir tan bien.
-¡Pues el asno, señor!

Las preguntas


1. ¿Cómo podríamos llamar a esta forma de abordar los conflictos?
2. ¿La emplean solamente animales poco evolucionados en la escala filogenética o por lo contrario la utiliza también el homo sapiens?
3. En este supuesto, ¿lo hace solo en contextos de guerra o la emplea también en contextos cotidianos de  normalidad?
4. ¿La utiliza también en entornos  laborales?
5. ¿Se emplea en situaciones interpersonales?

A la utilizada por el león se llama  DOMINACION y tiene como características  la imposición,  de forma unilateral,  del poder del más fuerte. Llega a una solución basada en la violencia o en maniobras políticas, y da como resultado final el Gano / Pierdes.

Las  fábulas de Esopo,  se ubican entre los siglos siglos VII y VI a. C.
En el siglo XXI, los sociólogos y los economistas la ejemplifica a través de índices o coeficientes.


Así,  por ejemplo, el coeficiente Gini mide la desigualdad en todas las capas sociales. Si toda la renta la acaparara una sola persona -desigualdad máxima- y el resto no recibiera nada, el coeficiente Gini sería  igual a 1. Estaríamos ante  el caso de la fábula arriba expuesta: toda la caza se la llevó el león. Si la renta se distribuyese entre todos de forma exactamente igual, el Gini sería cero. Estaríamos ante el reparto que inicialmente hizo el asno  pero que no fructificó.


DOMINACIÓN: Mejoran  las explicaciones; no mejora  lo explicado
La sociología explica las situaciones de dominación de forma más sofisticada, pero, esta sigue existiendo, en  una sociedad que se dice civilizada y democrática. Cada vez tenemos mejores explicaciones, más datos objetivos, pero ¿qué hacemos ante ello aparte de explicarlo? Mejoran las explicaciones; no mejora lo explicado.


Un cerebro invadido por el miedo no entiende de sueños (futuro): ¿Vivir o sobrevivir?


LOS DATOS: Ejemplos concretos de dominación
Reparto de la riqueza en los diferentes países.


Los valores más comunes del coeficiente Gini, referidos al reparto de la riqueza  en los diferentes países están ubicados entre el 0,3 y el 0,5 según demuestra Richard Wilkinson y Kate Pickett [7]. Es decir, una gran desigualdad.

En el caso de la fábula,  la zorra haría tres partes: una con la mayor parte de la caza, otra con algunas piltrafas, y otra  parte más un poco más consistente que la última, pero muy alejada de la primera. No sé si sería aceptada por el león de la fábula, pero si es tolerada por el « león » contemporáneo. Con estos índices Gini podemos intuir que,  muchas situaciones actuales,  disfrazadas de negociación, realmente  son una pura  dominación en la que está presente y manifiestamente visible “la parte del león” de la fábula de Esopo.
Hay que recuperar  viejas palabras y sus contenidos: reciprocidad, equidad, justicia... Una forma práctica de aplicarlas puede ser a través del  “Índice de Robín Hood” que algunos proponen y en el que otros ven graves consecuencias.

Cuanto mayor es la desigualdad, mayor es la puntuación del Índice de Problemas Sociales y de Salud, según los autores citados anteriormente. También hay una alta correlación entre desigualdad e infelicidad.
Referido a España ver:

Bruselas alerta a España del alza de la desigualdad y la exclusión social https://economia.elpais.com/economia/2017/02/21/actualidad/1487707618_196831.html

Thomas Piketty concluye lo siguiente:

La lección general de mi investigación es que la evolución dinámica de una economía de mercado y propiedad privada que es abandonada a sí misma contiene en su seno fuerzas convergentes […], pero también poderosas fuerzas  de divergencia, potencialmente amenazadoras para nuestras sociedades democráticas y para los valores de justicia social en que están basadas”. [8]

¿Llegará a cumplirse la nefasta profecía de Marx y materializarse el « principio de acumulación infinita »? : Tendencia del capital a acumularse y a concentrarse en proporciones infinitas, sin límite natural.

¿Se cumplirán las diversas hipótesis sobre la autodestrucción del capitalismo?

“Ahí se origina lo que Albert Hirschman llama “tesis de la autodestrucción”, según la cual la dinámica propia del capitalismo lleva a agotar y socavar el funcionamiento moral necesario para el cabal funcionamiento de la sociedad de mercado [9]

Contextos laborales

En el ámbito empresarial, con el índice Gini se puede ver, entre otras cosas, la distribución de los salarios en las empresas. Se puede obtener información de la desigualdad salarial entre los distintos sectores productivos e incluso dentro de las empresas del mismo sector. También, se ven  las diferencias existentes entre los distintos cargos en una empresa, cual es el grado de desigualdad entre los sueldos más altos y los más bajos de una empresa.
Un caso concreto

El salario del pasado ejercicio del consejero delegado y director creativo de Burberry, Christopher Bailey, se ha visto reducido un 75%, según ha publicado The Wall Street Journal. Esta reducción ha sido consecuencia de los desastrosos resultados de la lujosa firma, con los que les ha sido imposible alcanzar los objetivos de beneficio.

En consecuencia Bailey recibirá alrededor de 2,41 millones de euros, en vez de los 6,6 millones del año anterior, de acuerdo con los resultados publicados anuales de Burberry publicados hoy.

¿Cuál será el “Abanico Salarial” de esta empresa? (Diferencia entre el salario más alto y el más bajo)  Vamos a suponer que el sueldo más bajo que paga sea “mileurista” y no “nimileurista”que es el que se ha puesto de “moda” en los últimos tiempos. Supongamos que la persona que menos cobra sean 1.500 €. Si dividimos 2,41 millones entre 1.500 € el resultado es de 1.606,66.
Si dividimos  6,6 millones entre 1.500 € el resultado es 4.400. El Sr. Bailey cobra, el sólo,  anualmente,  una cantidad igual a la que cobran anualmente,  el conjunto de  4.400 personas de su misma empresa. ¿Aporta él por sí solo, lo que aportan en conjunto esas 4.4000 personas?



Qué nos diría hoy Henry Ford (empresario industrial, no financiero,  que aportó mucho a la sociedad y no “vendió humo”, sino productos tangibles, prácticos). Acabó legando  gran parte de su fortuna a la Fundación Ford.


Sin duda se inspiró en aquella máxima religiosa de “devolver a lo sociedad lo que la sociedad me ha dado” y la concretizó en la búsqueda del equilibrio del siguiente ratio:
Cuanto me ha dado la sociedad / Cuanto le he devuelto


También   sostuvo lo siguiente:
“Hay una regla para el empresario y es: hacer los productos con la mayor calidad posible al menor coste y pagando unos sueldos lo más altos posibles”

Al Sr. Bailey es muy posible que le estimule y se guíe por la siguiente fórmula: Autoestima = Realidad / Expectativas
De la misma  se deduce que cualquier aumento de nuestras pretensiones o expectativas lleva implícito un aumento del riesgo de fracaso y humillación. Para no frustrarse,  es fundamental saber establecer que es lo que consideramos unas pretensiones normales. Si nos referimos a los salarios más altos y al abanico salarial que predomina hoy en las empresas la pregunta es ¿podemos considerarlos normales?

Richard Wilkinson y Kate Pickett en el libro anteriormente mencionado sostienen:

 […] “la crisis económica de finales de 2008 y la recesión resultante nos ha demostrado cuán peligrosos pueden ser los salarios desproporcionados y las primas exageradas ». Además de poner en peligro el bienestar de poblaciones enteras con su actividad financiera”


Ya William James, el de la fórmula de autoestima anterior, en su día abordó el problema creado por las sociedades que generan expectativas ilimitadas entre sus miembros.


¿Aplicas en tu vida el “optimismo de pandereta” o por lo contrario recurres al optimismo funcional?

¿Alcanzas el   “justo término medio” aristotélico,  entre vivir según tus miedos y vivir según tus sueños?

Contextos interpersonales


Hace un rato que finalizó mi sesión de senderismo diaria: iba pensando en este artículo que me disponía a escribir al llegar a casa y, en un momento dado,  me crucé con un grupo de cuatro  personas. Hablaban acaloradamente – creo que criticando a un ausente- , y uno de ellos lo definió así: « De donde hay que pagar me voy, en donde recibo estoy »
Mientras los humanos no aprendamos a desenvolvernos de forma más frecuente y efectiva en el principio de « Yo Gano / Tú Ganas »,  no será posible desterrar los MIS: Malestares Individuales Subjetivos y no se incrementará el BIS: Bienestar Individual Subjetivo,   eso que llamamos felicidad y que o hacemos de ello un proyecto colectivo,  o reinará la infelicidad individual, en los pobre y en los ricos.

«Como ha quedado demostrado en los capítulos I y II, las mejoras en la calidad de vida actual no dependen ya del crecimiento económico: ahora la clave está en la comunidad y en cómo nos relacionamos unos con otros ». [10] 


Aquella fórmula que ya utilizamos en otros artículos de R x R = R, Recursos por Relaciones igual a Resultados, también funciona aquí. Si  buscamos como resultado la felicidad, no hay que poner tanto el foco en los recursos y sí hay que ponerlo en las relaciones. Estas no se fomentan con la dominación sino con estrategias de interdependencia y cooperación, concretizadas a través de la reciprocidad y de la capacidad de empatía  lo cual permite  establecer vínculos emocionales. Los robots, la inteligencia artificial y el ‘big data’, que eliminarán muchos puestos de trabajo,  tardarán en llegar, si es que llegan algún día, a entender esto de las emociones y de la empatía. 


Y tú ¿qué medidas propones?

Y lo que es aún más importante: ¿Qué te propones hacer tú?




No domina y compite el competente; 
domina y compite el incompetente. 
El competente coopera.




Próximo artículo:
LA FRAGILIDAD DEL TRABAJO 3
EL AHORA: De lo general a lo concreto.
         QUE MÁS  PODEMOS HACER,
                                     Para que  lo que puede  acabar pasando, no pase.
   “Ser es hacer”



Referencias Bibliográficas


[1] Collins, Randall.: “Sociología de las filosofías. Una teoría global del cambio intelectual”. Editorial Hacer, S.L., 2005

[2]Harman, Willis.: “El cambio de MENTALIDAD. La promesa del siglo XXI”: Editorial Centro de Estudios Ramón Areces, S.A. 2001

[3]  Todorov T. (15 de diciembre de 2014). “La resistencia es fundamental en democracia” El País. https://elpais.com/cultura/2014/12/14/actualidad/1418573544_527562.html

 [4]  Piketty Thomas.: “El capital en el siglo XXI”, Fondo de Cultura Económica de España, S.L., 2014, p. 643

[5] Collins, Randall.: “Sociología de las filosofías. Una teoría global del cambio intelectual”. Editorial Hacer, S.L., 2005, p.881

[6] Video: “El cómo satisfagas tus necesidades SIDIDA, marca el camino que te llevará a la CIMA” https://tv.uvigo.es/video/93279.html

[7]  Wilkinson, R. y  K. Pichett.: “Desigualdad. Un análisis de la (in)felicidad colectiva”, Turner Publicaciones S.L., 2009

[8]  Piketty Thomas.: “El capital en el siglo XXI”, Fondo de Cultura Económica de España, S.L., 2014, p. 643

[9]  Arias X.C. y Costas A. “La nueva piel del capitalismo”, Galaxia Gutenberg, S.L., 2016, p. 243

[10]  Wilkinson, R. y  K. Pichett.: “Desigualdad. Un análisis de la (in)felicidad colectiva”, Turner Publicaciones S.L., 2009, p.272